Si eres una persona que está en contra de la ley de igualdad, de la ley del aborto, de la ley de dependencia, del matrimonio entre homosexuales, del estatuto de los trabajadores autónomos, la ley de la violencia de género, la sanidad y enseñanza pública, o del retorno de los soldados de Irak, no sigas leyendo, no va para ti este escrito. Si estás de acuerdo, aunque sea en parte de las cosas anteriores es que alguna vez has votado al PSOE. En un momento tan difícil como éste, no es momento de mirar las cosas malas que se han hecho, que es indudable que se han hecho, si no de poner en una balanza las buenas que han hecho unos y otros. No hagas un voto por despecho, no hagas un voto por cambiar, haz un voto con el corazón, vota a quien en el fondo te da más confianza. El voto del despecho nunca es bueno, y ahora menos que nunca. Conforme se acerca el 20N Rajoy se ve más ganador y ahora ya no se esconde en decir que lo único que no tocará son las pensiones. Rubalcaba se ha comprometido a muchas cosas, démosle una oportunidad. Aquellos que lo veis desde un prisma nacionalista, muy respetable por otra parte, debeis de pensar con que gobierno ha conseguido Euskadi la paz, o con que partido ha conseguido la mayor tasa de autogobierno Catalunya. Los votantes de IU, entre los que alguna vez me he encontrado yo, adelante con sus ideas, estaría bueno, pero que piensen con la cabeza y el corazón con quien se consiguen preservar más derechos fundamentales. La crisis no se solucionará con un cambio de gobierno, fijaros como reaccionan los mercados ante el probable triunfo del PP, nada más lejos de tranquilizarse. Seguramente que ganará el PP, pero que al menos no sea por tu voto, corazón de izquierdas.
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