En siete semanas tenemos elecciones. Todas las elecciones generales son importantes pero éstas especialmente. Son las elecciones de la crisis económica. Procuro estar muy pendiente a las medidas que anuncian los políticos y me asusta. Es evidente que las posibilidades de una clara victoria del PP son de un 95% al menos. Ellos también los saben y por ello cada vez les importa menos quitarse la máscara. No al aborto, privatización de la sanidad y la educación, mantener o agravar las medidas económicas que tomo Zapatero como bajar sueldo a los empresarios y bajar las pensiones.. etc. Curiosamente las últimas medidas se llenaron la boca de criticarlas y ahora se escudan en que igual estamos tan mal que hay que mantenerlo. Pues claro que estamos mal, por eso estamos en crisis. Dejan caer declaraciones que igual España está peor de lo que pensaban y que a lo mejor no nos pueden "salvar" tan pronto como hubieran podido. En hipocresia les pondría un 10. En el otro lado tenemos a Rubalcaba. Evidentemente ha formado parte del gobierno socialista, pero para lo bueno y para lo malo. El PP olvida con facilidad en gran papel que ha hecho en el Ministerio del Interior. Es la primera vez en muchos años que un candidato expone con claridad sus ideas. Apoyo incondicional a la sanidad y educación pública, búsqueda de financiación para la sanidad mediante impuestos en tabaco y alcohol, devolver el sueldo a los funcionarios e incluso prometer una leve subida, no bajar pensiones, apoyar sin tapujos las comunidades con dos idiomas, gravar a las ricos, poner impuestos a bancos para emplearlos en creación de empleo.... Creo que nadie puede discutir que las medidas van en la buena linea, sólo queda una duda, ¿cumplirá lo que dice? Si lo cumple no hay color entre la opacidad de Rajoy y la claridad de Rubalcaba. Creo que Rubalcaba no es un mentiroso, por lo que pido a la gente que aprecia un discurso con claridad que no dude en el voto el 20 de Noviembre.
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